Celebran 50 años en Santuario de tortugas golfinas de México

ESCOBILLA 2MAZUNTE, OAXACA- Este  verano 2014, se celebra medio siglo que playa La Escobilla, Santuario de la tortuga golfina (Lepidochelys olivacea) ha sido monitoreada en sus recurrentes espectáculos naturales de arribo masivo de hembras anidadoras que entre los meses de julio a febrero depositan su legado de vida, según informó Natalia Parra del Ángel, Directora de MarSelva Conservación, procedente de Acapulco, Guerrero, quien realizó un recorrido en ese Santuario natural, ubicado a unos 40 kilómetros de Puerto Escondido.
Entre la Escobilla y Puerto Escondido, se encuentra en Playa Mazunte, el Centro Mexicano de la Tortuga  CMT que celebra 20 años de su fundación y actualmente es remodelado y dirigido por Manuel Rodríguez Gómez. 
Parra del Ángel, indicó que recorrió el CMT, que es un centro de investigación para la conservación de las tortugas marinas, terrestres y dulceacuícolas de México, todas en peligro de extinción, aunque solo las marinas están oficialmente reconocidas en ese estatus por leyes internacionales y mexicanas.

Las tortugas golfinas anidan en la mayor parte de las playas del Pacífico mexicano, consideradas playas de anidación solitaria y solo tres playas, la Escobilla y Morro Ayuta en Oaxaca e Ixtapilla, en Michoacán, registran anidación masiva, sumando 11 playas en el mundo con el fenómeno natural de arribo masivo de tortugas golfinas, según explicó a MarSelva Conservación, el investigador Ernesto Albavera del CMT.

El CMT con el Instituto de Investigaciones Biomédicas y la Facultad de Medicina Veterinaria de la UNAM, la Universidad del Mar y el CIAD Mazatlán, Sinaloa, estudian la presencia del fibropapiloma en  tortugas marinas, genética, temperatura asociada a la determinación del sexo de las nuevas tortugas golfinas y la sensible afectación de escarabajos a los nidos.
MERMA DE TORTUGAS

Parte de este grupo interdisciplinario es la investigadora Martha Harfush, del Centro Mexicano de la Tortuga, quien explicó a MarSelva Conservación que de acuerdo con monitoreos durante 50 años en La Escobilla, un promedio de un millón 200 mil anidaciones, se registran durante varias arribazones de golfinas al año y los especialistas calculan que un total de 120 millones de huevos son depositados en esa playa anualmente.

 

Esa cifra, explicó Parra del Ángel, suena realmente alentadora y supondría la recuperación de las poblaciones de esta especie de quelonios marinos en peligro de extinción, sin embargo, solo alcanzan a convertirse en tortuguitas marinas y regresar al mar aproximadamente el 10 por ciento, es decir, unos 12 millones de nuevas crías de golfinas.

 Con 16 kilómetros de litoral, la Escobilla, probablemente concentra cada año, el mayor número de anidaciones de hembras anidadoras de la especie golfina en el mundo, sin embargo, la presencia de una plaga de millones de escarabajos que no han podido ser erradicada, consume materia orgánica muerta y viva, depredando gran parte de los nidos de tortugas marinas y el Cambio Climático, está contribuyendo la merma en el nacimiento de tortuguitas.

Además, la investigadora Martha Harfush, indicó a MarSelva Conservación que se ha detectado que el Cambio Climático, está provocando incremento en la temperatura en el hábitat de los nidos depositados en las playas legando a 38 y 39 grados centígrados que son letales para los embriones, que prácticamente se cocinan dentro del nido.

TORTUGAS NOS BENEFICIAN

“Las tortugas de las especies golfina y laúd en sus hábitos alimenticios devoran grandes cantidades de medusas, conocidos como “aguas malas” o “quemadores”, que a su vez, depredan huevecillos de peces y peces juveniles. La ausencia de tortugas marinas, supone el incremento de poblaciones de medusas y con ello, la baja de las pesquerías, por eso las tortugas marinas valen más vivas que muertas”, afirmó Parra del Ángel, quien llamó a no saquear, ni consumir huevos, ni carne de tortuga marina.