Excampeón del CMB en la cima del mundo
Guadalupe Pintor aparece en la lista de la Clase 2016 que ingresará al Salón de la Fama en junio próximo. Lo hará al lado del boricua Macho Camacho y el panameño Hilario Zapata
CIUDAD DE MÉXICO.
Lupe Pintor, a sus 60 años, sigue disfrutando la vida como un niño. Ayer, tras la noticia de que será introducido al Salón de la Fama del boxeo internacional, el ex campeón mundial de pesos gallo y súper gallo se dejó consentir por los amigos en un desfile de llamadas telefónicas felicitando al Grillo de Cuajimalpa.
La noticia le llegó muy temprano. Serás introducido al Salón de la Fama del Boxeo, junto al boricua Héctor Macho Camacho y el panameño Hilario Zapata, le dijeron. Que la fiesta será en junio, en el templo del boxeo que se localiza en Canastota, Nueva York.
La verdad, todavía no me la creo. Ya se habían tardado, pues ya son casi 30 años los que llevo fuera del boxeo. Pero no importa, pues la noticia de este día es más importante que ganar cualquier pelea o cualquier título. El anillo que me darán será de la Clase 2016 y no me lo quita nadie”.
Pintor se siente agradecido. Dice que la vida es un ratito y que hay que saber disfrutarla. Ayer su mente viajó décadas atrás, desde el niño que sufrió en el barrio de Cuajimalpa, el joven pugilista que se hizo campeón del mundo tras derrotar al Cañas Carlos Zárate, así como el dramático duelo contra el inglés Johnny Owen (1980 en Los Ángeles), quien perdiera la vida horas después del combate.
Todo lo volvería a vivir, no cambiaría nada de lo ocurrido. Del título contra Zárate, muchos me atacaron por el resultado. Yo sé que le gané a ley. Los golpes recibidos de niño y los abusos de algunos templaron mi carácter. Y de Owen, este día (ayer) lo he tenido en mis pensamientos. Casi todos los días lo recuerdo. Él y yo estamos en paz”.
Guadalupe Pintor entrará al Salón de la Fama con una marca de 56 triunfos, 14 derrotas y dos empates. Fueron 42 los nocauts que impuso a lo largo de su fructífera carrera.
Pintor se hizo campeón mundial gallo en 1979, venciendo a Carlos Zárate en tremendo agarrón. Aunque más duro fue el protagonizado con el puertorriqueño Wilfredo Gómez, en el que el boricua salió airoso en el asalto número 14. Dicha pelea, en peso gallo, fue premiada como la Pelea de los 80 por la revista Ring. Fue celebrada en 1982, en Nueva Orleans. Se retiró en 1995.
Es precisamente el combate más recordado por el ahora hombre de 60 años. “Si me pides escoger la mejor pelea de mi vida, fue la que protagonicé con Wilfredo”.
Aunque también recuerda que “más dura fue la caída que tuve en una Kawasaki (moto) que paró mi carrera por más de un año”. El pugilista se partió la mandíbula y sufrió algunas fracturas.
¿A qué me sabe esta noticia? Es una recompensa, lo más maravilloso que te puede pasar. Estaré al lado de grandes figuras. Ahí, en el Salón de la Fama, están grandes boxeadores mexicanos y amigos míos: Púas Olivares, Salvador Sánchez, Miguel Canto, Vicente Saldívar, Pipino, Julio César. Yo digo que la mayoría merece estar ahí. A lo mejor yo soy el que no lo merezco. ¿Chillón?, sólo un nudo en la garganta. Allá sí que se me saldrán las lágrimas”.
Héctor Camacho y el Macho Time
Héctor Camacho conquistó el título súper pluma del CMB en 1983 con un nocaut en cinco asaltos ante Rafael Limón, agregó un segundo título con un triunfo por decisión unánime ante José Luis Ramírez en 1985 por la corona del peso ligero del CMB, y sumó su tercer título en 1989 al derrotar a Ray Mancini por el cetro junior welter de la OMB.
Los tiempos de Hilario Zapata
El excampeón mundial panameño Hilario Zapata fue seleccionado para ingresar al Salón de la Fama de Canastota, de Nueva York. Zapata se coronó campeón mundial minimosca en 1980 del Consejo Mundial de Boxeo, realizó ocho defensas exitosas, registró un récord de 43 triunfos (14 KO), 10 derrotas y un empate.