La laudería mexicana se reunió en el Conservatorio

violasMostrar las bondades de violines, violas, chelos y arcos hechos en nuestro país fue uno de los propósitos de la Exposición de Laudería Mexicana, que se presentó en el Conservatorio Nacional de Música. Organizada por Andrea Castañeda y Alberto Soria, incluyó exhibición y venta de instrumentos, conferencias y un documental.

Fueron reunidos lauderos de varias ciudades del país para ofrecer sus productos a alumnos y maestros del Conservatorio, así como a músicos y público en general. Con estos encuentros se busca impulsar el oficio y que los visitantes adviertan la calidad de los instrumentos que se hacen en este país, dijo Soria, proveniente de Mérida.

“El hecho de tener aquí varios instrumentos, que además se pueden tocar, ayuda a que los interesados conozcan un universo de sonidos, estéticas y formas. Muchas veces los alumnos tienen un solo instrumento desde que inician su carrera, así que conocer otros nuevos es conocer otros mundos”, dijo Soria.

En la elaboración de violines, violas y violonchelos casi no se usan maderas nacionales, porque no son las más apropiadas, explicó el laudero: “Por tradición, se usan maderas europeas, pues la estética de los instrumentos fue desarrollada con las cualidades que ofrecen. Son especies que crecen en climas diferentes a los nuestros. Puedes construir un violín con maderas parecidas, pero el sonido no será el mismo”.

En años recientes el nivel de calidad de los lauderos mexicanos se ha incrementado porque muchos se han especializado en el extranjero, aseguró Soria. Además de la Escuela de Laudería del INBA en Querétaro, algunas instituciones ofrecen talleres.