Me siento violada en mi economía: ahorradora de Ficrea

justicia«Me siento violada en mi economía, en mis proyectos, en mi vida, la está violando el gobierno. No tenemos ya esa garantía de ahorrar, porque llega alguien y te quita lo que es tuyo», dijo Victoriana Jiménez, una de los 6 mil 400 ahorradores defraudados por Ficrea.

Tenía planes e ilusiones de poner su «changarro» en Nayarit, donde actualmente vive con sus dos hijos. Quiere seguir apoyándolos en sus estudios, el joven en la universidad, a la niña en la secundaria y no depender de nadie.

Victoriana tiene 52 años, es separada y está desempleada. «Me salía más caro a veces mantener al marido», bromeó a pesar de su indignación y enojo, porque sus ahorros están ‘congelados’. No sabe si se los regresarán completos y cuándo. Sus ahorros eran su sustento.

El viernes pasado, la Comisión Nacional Bancaria y de Valores retiró a Ficrea la autorización para continuar con sus operaciones, declaró su disolución y liquidación debido a operaciones fraudulentas.

Este martes doña Victoriana sostenía una cartulina verde fosforescente en la que se leía: «Exigimos Justicia» y gritaba consignas «Gobierno ratero devuelve mi dinero», mientras caminaba en la manifestación que unos 500 defraudados hicieron afuera de la Bolsa Mexicana de Valores, después al Ángel de la Independencia y en la Secretaría de Gobernación.

«¿Por qué (ahorré) en Ficrea? Porque fue una institución que revisé antes de meter mi dinero. Estaba avalada por la Comisión Nacional Bancaria, por la Condusef, que son las instituciones que cuidan de las finanzas de nuestro país. Si ellos fallaron con nosotros van a fallar con los demás. Son instituciones avaladas. No son instituciones ‘patito'», recordó la mujer.

Mientras caminaba sobre Paseo de la Reforma para ir al Ángel de la Independencia, Victoriana recordó que ahorró desde que empezó a trabajar, pero «acababa de meter todos esos ahorros en agosto y el 7 de noviembre declaran a Ficrea intervenida» por operaciones fraudulentas.

Ella afirmó que ha trabajado desde muy joven y comenzó a ahorrar desde 2005 en MetLife, la ahorradora en la que estuvo mientras trabajó en el Instituto Nacional de las Mujeres, dependencia federal que, según su portal en internet, trabaja para propiciar el desarrollo integral de todas las mujeres mexicanas. Después sacó su dinero y lo metió a Ficrea.

No quiso revelar cuánto tenía ahorrado; sólo dijo que «el promedio de la gente trabajadora y que estamos aquí es de un millón a millón y medio». Otro señor gritó en ese momento «hay quienes tienen más».

A Victoriana no le importa cuánto le deben a los demás, pero habla por todos los defraudados por Ficrea: «No somos gente que queremos que nos mantengan. No estamos pidiendo dinero, estamos exigiendo nuestro dinero».