No me llames «luchona», trabajo porque me gusta ser independiente

CIUDAD DE MÉXICO. – Las mujeres hacemos diariamente algo para que este mundo sea mejor para las nuevas generaciones.

Me gusta más hablar de equidad que de igualdad, pues en realidad nunca podríamos ser iguales hombres y mujeres, lo que sí podemos generar son condiciones equitativas para lograr nuestras metas, ya sea personal o profesionalmente.

De acuerdo con una encuesta realizada por al firma, que analiza el comportamiento de los consumidores, 88% de las amas de casa entrevistadas son mamás, de ellas 28% laboran fuera de casa medio tiempo, 27% trabajan fuera de casa tiempo completo, mientras que 33% trabajan dentro de casa.

¿Qué queremos las mujeres de hoy? Generalizarlo sería un error, pero puedo responder por mí, y lo que quiero es tener equilibrio en mi vida, cumplir con las tareas que implican tener una familia, pero también mantener esa vida profesional que me permite satisfacciones personales.

Para muchos esa respuesta implica que queremos todo, y sí ¿por qué no? aunque ello implique que las mujeres, como dice Kantar Worldpanel, seamos “malabaristas de tiempo completo”.

Así, de acuerdo con esta radiografía que realizó, de las mamás que trabajan fuera de casa y en casa: 20% labora por necesidad, pero le gusta ser independiente, tener su propio dinero y aunque pudiera, no dejaría de trabajar.

Solamente 1% no necesita hacerlo, pero lo realiza por placer, porque le gusta lo que hace, mientras que 15% trabaja sólo por obligación, pero le gustaría poder quedarse en casa a cuidar de su familia.

Algunas decidimos salir a trabajar fuera de casa, y en casa también hacemos lo propio, a otra tantas no les queda de otra, pero sería ideal que ello estuviera acompañado de un desempeño equitativo de las labores del hogar, en donde las mujeres no tengamos hasta tres turnos, porque queremos tenerlo “todo”.

Un día celebraré, como la mayoría lo hace, el Día Internacional de la Mujer, y será cuando cambie la estadística, esa que señala que las mujeres aportamos 77.2% del total del tiempo que en los hogares se destina a actividades como el cuidado de los hijos o tareas del hogar.

Me queda claro que este tipo de estadìsticas también tienen que ver con la estructura social, la cultura laboral en la que hace poco no existía la licencia de paternidad para que los hombres estuvieran al lado de sus hijos y mujer, y que muchos de los hombres están inmersos en esa estructura, y que también hay mucho que trabajar dentro de las empresas, pero ese es tema para otra ocasión.