Raúl Castro se deslinda por ataques a diplomáticos

Excelsior

La Habana-El presidente de Cuba, Raúl Castro, contactó al diplomático estadounidense de mayor rango en La Habana para abordar las graves preocupaciones de Washington por las afectaciones a la salud que varios de sus diplomáticos sufrieron en la capital cubana.

Lo que el presidente cubano hizo a continuación sorprendió a Washington, dijeron a la agencia Associated Press varios funcionarios estadunidenses con conocimiento de lo sucedido.

En una inusual conversación cara a cara, Castro le dijo al embajador Jeffrey DeLaurentis que estaba igual de perplejo con el caso.

En lugar de dejar que sus subordinados se encargaran del asunto, Castro negó personalmente cualquier responsabilidad de su gobierno.

Los cubanos incluso se ofrecieron a permitir el ingreso del FBI a La Habana para que investigue.

Sin embargo, el permiso de entrada fue extraordinario.

(El gobierno cubano no dice a menudo) vamos a cooperar con Estados Unidos, esto les sería de mucha ayuda”, dijo David Rubincam, ex agente del FBI que trabajó en Moscú, un sitio similarmente hostil.

La lista de víctimas estadunidenses confirmadas era mucho menor el 17 de febrero, cuando el país presentó su queja inicial ante las autoridades de Cuba.

A la fecha, el número de casos con confirmación médica es de 21, además de varios canadienses afectados.

Ottawa confirmó que uno de sus enviados había sido tratado por síntomas similares a los que reportaron los diplomáticos de EU.

Más de cinco, pero menos de 10 familias canadienses fueron afectadas por los ataques», emitió la cadena de televisión canadiense CBC, citando fuentes anónimas.

Autoridades de Canadá dijeron que los funcionarios cubanos no son sospechosos por estos ataques y que han estado cooperando en la investigación.

Algunos estadunidenses sufrieron pérdida auditiva permanente o daño cerebral leve, incidentes que han causado alarma en la unida comunidad diplomática de La Habana.

Por otra parte, un grupo de senadores republicanos llamó este viernes a Washington a adoptar represalias por el supuesto «ataque acústico», como el expulsar a representantes cubanos o incluso cerrar la embajada en La Habana.

En una carta, los cinco senadores republicanos, -Tom Cotton,Richard Burr, John Cornyn, Marco Rubio y James Lankford, pidieron al secretario de Estado, Rex Tillerson, que le recuerde al Gobierno cubano sus responsabilidades hacia los diplomáticos.

Además, pedimos que inmediatamente declare persona non grata a todos los diplomáticos cubanos acreditados en Estados Unidos y, si Cuba no toma acciones concretas, cierre la embajada en La Habana», escribieron.

Por lo menos otra nación, Francia, realizó pruebas a su personal diplomático en busca de posibles lesiones a causa de dispositivos sónicos.

Sin embargo, las autoridades estadunidenses afirman que existen verdaderas razones para cuestionar si es que el gobierno isleño perpetró una campaña clandestina de agresiones.

Los investigadores consideraron que tal vez una facción disidente de las fuerzas de seguridad de Cuba haya actuado, posiblemente en combinación con otro país, como Rusia o Corea del Norte.