“La jerarquía se gana día con día” Chepo de la Torre

de la torreJosé Manuel de la Torre jugaba a los carritos en medio de los campeonísimos. La niñez del Chepo de la Torre fue al lado de Don Javier de la Torre, uno de los entrenadores más ganadores con Chivas y vivió muy de cerca la grandeza de las Chivas.

Muchos años después y ocho desde que él ganó el onceavo título, el Chepo vuelve a Verde Valle a dirigir una práctica con el descenso en el retrovisor.

En un mano a mano con La Afición el Chepo sentenció que quiere una entrega constante de sus jugadores y que no pondrá a nadie a jugar sólo por un pasado glorioso o porque fue el fichaje más caro del equipo en el pasado draft de Cancún.

¿Qué significa para usted volver a trabajar en Verde Valle?

«Es entrañable todo porque me trae muchos recuerdos desde que era niño y nos tocó inaugurar estas instalaciones, y no había nada alrededor, había caballerizas y las acomodaron con campos de futbol. Me vienen muchos recuerdos y después como profesional, estuvimos trabajando acá, principalmente en el Club Guadalajara de (calle) Colomos y como técnico también grandes recuerdos, porque acá fue nuestro lugar de trabajo, entonces retomar nuestra carrera aquí en Guadalajara también me trae gratos recuerdos».

¿Respetará jerarquías de Bravo, Reyna, De Nigris?

«Las jerarquías se ganan, se ganan todos los días con el trabajo, se trata de que se las ganen cada uno de ellos».

¿Cómo recuperar a jugadores como Bravo y de Nigris que no andan?

«Es con trabajo, nada más y reconociendo las cosas. No es que no anden tan bien, puede ser que no estén bien ubicados, detalles que prefiero decírselos a ellos, seguir trabajando para darles toda la confianza para cuando tengan la oportunidad la puedan hacer».

¿Se tentará el corazón con algún jugador de jerarquía y mandarlo a la banca?

«Siempre he buscado que juegue el que mejor esté y el que le haga mejor al equipo, entonces es parte de la misma competencia interna de un grupo. Hay veces que tienes que meter a un jugador para recuperarlo y hay veces que sólo se recuperan jugando, entonces las circunstancias nos lo dirán».

¿Tiene ya un once definido para el debut en León?

«Los jugadores los conocemos, sabemos en qué posición se desenvuelven, pero sabemos que hay jugadores que a lo mejor no están en su mejor nivel y necesitan a lo mejor un trabajo específico, cosas que tenemos que evaluar no sólo de nosotros, también del rival. En este tiempo vamos a seguir observándolos en función de ellos mismos y del rival cada que se acerque el partido».

¿Cómo se imagina el debut contra el León?

«Siempre es muy agradable visualizar escenarios, en León que siempre ha sido una rivalidad tremenda con la gente de El Bajío contra el Guadalajara y nos lo trasladaron desde nuestros padres y así fue, ahora no creo que sea la excepción. Los dos equipos puede que no pasen su mejor momento, pero eso no quiere decir que no sea un buen partido. Es la emoción de la víspera del partido, esa adrenalina previa a un partido se muestra un poquito más».

Siendo realistas, ¿Qué diferencias encuentra de las Chivas de 2006 a estas?

«Las circunstancias son diferentes, es un reto diferente, nuevo, es parte del crecimiento que queremos tener nosotros».

¿Le dolía ver mal a Chivas?

«Siempre me ha dolido que los equipos que he pertenecido no les vaya bien, en este caso me duele. He participado en muchos equipos y en general, al futbol mexicano, cuando participan internacional mente alguna selección me molesta que no les vaya bien».

¿Chepo es perfeccionista, exigente o cómo se define como técnico?

«Es parte de mi persona, soy una persona que se levanta muy temprano casi siempre aunque no tenga actividades, trato de hacer ejercicio, soy muy ordenado y soy muy exigente. Gastas lo mismo haciendo las cosas bien, que haciéndolas mal, sólo que el que las hace mal las tiene que repetir, sólo que dejas una mala imagen, hay que estarse preparando constantemente. La competencia en todos lados está latente y si te descuidas un poco te van a ir ganando la carrera, por eso me exijo mucho estar siempre muy atento y a los que están a mi alrededor de la misma manera, no es nada más, exigirles, hay que ponerles el ejemplo».

¿A quién le aprendió todo eso?

«Es de educación, es la forma en que me educaron y es parte de lo que aprendí en estas instalaciones, lo que aprendí con mis papás, con mis tíos, con mis primos, siempre estuvimos muy cercanos acá».

Del equipazo del 86 donde estaba usted con Néstor como jugadores, ¿Cómo le hacían para estar unidos y dar resultados?

«En aquel entonces era un equipo que tenía cinco o seis años jugando juntos, cuando fuimos campeones era la tercera final que se jugaba prácticamente con el mismo equipo, con algunos jóvenes que ya veníamos apareciendo, Alberto Guerra ya tenía dos finales y a la tercera fue la vencida, se armó un gran grupo. Después hubo ciclos diferentes, recuerdo bien que ese equipo más allá de grandes futbolistas, tenía grandes personas».

¿Eso es lo más importante para usted?

«Necesitamos tener grandes futbolistas, primero se fija en la persona, cómo es para traerlo, en este caso yo llego de relevo y las circunstancias son diferentes, lo valoramos para encausarlo en el objetivo principal que es ponerlo en una zona mucho más estable de lo que está».