Empresarios del D.F. apoyan al Instituto Intercultural Calmécac.

EMPRESARIOS APOYAN A INSTITUTO CALMECAC (3)Por: Haywood Miller

Fotos: Ezequiel Gómez Leyva

¿Porque tan cerca  y tan olvidados? ¿Se necesita tener un padrino político fuerte para poder acceder a programas o apoyos por un proyecto o una causa? En la política oaxaqueña esa parece serla tónica, si algo redunda en votos o apoyo político, se le dota de todo lo necesario para que sobresalga, claro está, con el consabido compromiso de que cuando se le requiera tendrá que presentarse en pago por el impulso ya sea artístico o de cualquier tipo.

Esto ha sido un gran muro infranqueable que el Instituto Intercultural Calmecac enfrenta, ubicados en la comunidad de San Juan del Rio Tlacolula Oaxaca, donde los padres de familia han hecho un frente común y trabajan con tesón para sacar adelante este proyecto de la banda filarmónica encabezado por el Maestro Nathanael Lorenzo Hernández.

Sin embargo personas comprometidas con la cultura y el desarrollo de los pueblos se dan a la tarea de darles un impulso en su largo y difícil trayecto, personas que no buscan una posición política ni algo a cambio, y no son afanes de lucro lo que los mueve, simplemente el reconocimiento al esfuerzo y sacrificio de otros.

Tal es  el caso de el Grupo Impulsor del Mezcal, encabezados por el Director General, Luis Rodrigo Trinidad, con residencia en la ciudad de México, quienes motivados por el profesionalismo y la calidad musical de estos niños, se dieron un respiro y llegaron hasta esta comunidad con instrumentos musicales y otros apoyos, esto después de escucharlos interpretar sus piezas musicales en una de las salas de concierto de el Distrito Federal en el recorrido que realizaron en meses pasados.

Rodrigo Trinidad dijo, “es una verdadera satisfacción apoyar a quienes día a día se esfuerzan por dar lo mejor de sí, y realmente tenían que venir a conocer a estos niños aquí en su propia comunidad, porque he escuchado de ellos pero sobre todo conozco  sus carencias”.

Estos niños y jóvenes talentosos, han sabido enfrentarse a la sordera oficial, quienes  viajan a otros estados para apoyar otros proyectos, pero no se atreven a ser generosos en sus propio estado, porque eso no genera publicidad.

La alegría de los niños y los padres de familia se notaba en sus rostros vibrantes de emoción, y en algunos casos los ojos brillantes asomaban lagrimas de felicidad, y lo demostraron ofreciendo esa cálida hospitalidad propia de los pueblos indígenas de Oaxaca, nobles y desprendidos, sinceros y agradecidos, durante una comida preparada con  cariño para la ocasión.

Los integrantes de la comitiva, Luis Rodrigo Trinidad, Director General, Luz Elena Martínez Benítez, Relaciones Publicas, Daniela Ruiz Otero y Hazael Mateos,  disfrutaron los higaditos, comida que  se prepara durante las fiestas importantes y ocasiones especiales, tortillas de mano, y tejáte que fue repartido generosamente, claro sin faltar el mezcal que también se elabora en esta comunidad, ofrecido por el propio productor.

Los niños mostraron a los visitantes los avances en materia musical que han logrado,  los pequeños de seis  y ocho años mostraron para que serán utilizados estos instrumentos, y ofrecieron un pequeño concierto dirigidos por los maestros del Instituto.

El equipo de maestros que  conforman el Instituto  dijo que a pesar de que no han encontrado apoyo aquí en Oaxaca, siguen adelante, “no hay obstáculo que no se pueda sortear, porque además de recibir promesas de algunos políticos, -han sido precisamente, solo promesas que se las ha llevado el viento-, también  les han puesto piedras en el camino y algunos conciertos que se tenían agendados  han sido cancelados de manera extraña, por falta de seriedad o falta de coordinación”.

El Director del Instituto, Maestro Nathanael Lorenzo, dijo que sabe que seguirá recibiendo el apoyo de personas de fuera de Oaxaca, y que a pesar de todo continuará con este proyecto, fruto de siete años de investigación, porque se han tenido logros muy importantes como la profesionalización de uno de sus alumnos, y próximamente formalizaran las relaciones académicas con el país de Venezuela.

“No está de más –dijo-que quienes tengan el deseo de ayudar, lo hagan, de cualquier parte, de los paisanos en la Unión Americana, de los radicados en la capital Oaxaqueña y en el Distrito Federal, así como quienes por cualquier razón han emigrado a cualquier parte de la República con el propósito de sobresalir y que saben y han sufrido en carne propia los sacrificios para lograrlo”