Oficializan EU y Cuba restablecimiento de relaciones diplomáticas

El presidente Barack Obama pide una vez más al Congreso que ponga final embargo contra la isla; su par cubano, Raúl Castro, también confirma el anuncio

WASHINGTON, 1 de julio.- Luego de más de medio siglo de enemistad, Estados Unidos y Cuba restablecieron oficialmente sus relaciones diplomáticas, confirmó hoy el presidente estadunidense, Barack Obama.

En un anuncio desde la Casa Blanca, Obama dijo que ha llegado a un acuerdo para abrir embajadas en las respectivas capitales de cada país este mes.

Este es un histórico paso adelante en nuestro esfuerzo para normalizar las relaciones con Cuba», comentó Obama.

Pidió al Congreso estadunidense que ponga punto final al embargo vigente contra la isla, impuesto desde octubre de 1960.

El viaje de Kerry a La Habana será el primero de un secretario de EU desde 1947.

El mandatario estadunidense anunció también que el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, viajará a la capital cubana para encabezar el izamiento de bandera en la legación estadunidense.

Raúl Castro ratifica acuerdo

A su vez, el presidente de Cuba, Raúl Castro, confirmó la decisión de su país de restablecer las relaciones diplomáticas con Estados Unidos y abrir embajadas, en una carta dirigida a su homólogo, Barack Obama, informó la televisión estatal de la isla.

Me complace dirigirme a usted para confirmar que la República de Cuba ha decidido restablecer relaciones diplomáticas con los Estados Unidos de América y abrir misiones diplomáticas permanentes en nuestros respectivos países, el 20 de julio de 2015″, indica Raúl Castro en su carta.

Esa misiva fue entregada hoy por el jefe de la Sección de Intereses de Cuba en Washington, José Ramón Cabañas Rodríguez, al secretario de Estado interino Anthony Blinken.

La parte cubana asume esta decisión, animada por la intención recíproca de desarrollar relaciones respetuosas y de cooperación entre nuestros pueblos y gobiernos», indica el presidente de Cuba.

Raúl Castro recuerda que Cuba «se inspira en los principios y propósitos consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho Internacional» tales como la igualdad soberana, el arreglo de las controversias por medios pacíficos o abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado, entre otros.

Horas antes del anuncio oficial, la cancillería cubana dio a conocer que las embajadas reabrirán a partir del 20 de julio, en un comunicado luego de informar que el jefe de la Sección de Intereses de Washington en la isla, Jeffrey DeLaurentis, había entregado una carta del presidente Barack Obama a su par isleño, Raúl Castro.

Largo camino por delante

Tras 18 meses de negociaciones secretas apoyadas por la mediación del Papa Francisco y el Gobierno de Canadá, los dos líderes anunciaron simultáneamente y por separado en diciembre de 2014 que planeaban reabrir las embajadas en sus respectivas capitales y normalizar las relaciones.

La actual Sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, fundada en 1977, se convertirá en embajada. Igualmente sucederá con la misión diplomática de Cuba en Washington.

El acuerdo anunciado en diciembre pasado también incluyó un intercambio de prisioneros e intentó dejar de lado los 56 años de hostilidades desde que el ex presidente Fidel Castro, encabezando a un grupo de rebeldes, derrocó el 1 de enero de 1959 al gobierno de Fulgencio Batista, respaldado en ese entonces por Estados Unidos.

Dos años más tarde, el presidente estadounidense, Dwight Eisenhower, cerró la embajada de Estados Unidos en La Habana el 3 de enero de 1961, casi tres semanas antes de la fecha en que el mandatario electo John F. Kennedy tenía previsto tomar posesión del cargo.

En medio de fuertes tensiones, en abril de 1961, Kennedy dio luz verde a una invasión militar contra Cuba, organizada por Estados Unidos y con participación de exiliados cubanos. El ataque por la Bahía de Cochinos, en la región occidental de la isla, fracasó y reforzó la posición de Fidel Castro en su país y en el extranjero.

En octubre de 1962, Washington y Moscú estuvieron al borde de una guerra nuclear debido a una serie de misiles soviéticos que habían sido instalados en Cuba.

Las relaciones entre Cuba y Estados Unidos se comenzaron a tensar en los primeros años de la revolución de 1959, liderada por Fidel Castro, un fuerte crítico de Washington que permaneció en el poder hasta el 2008, cuando fue reemplazado por su hermano menor Raúl.

Con las relaciones diplomáticas restauradas, Estados Unidos y Cuba enfrentaría luego el reto más difícil: la normalización de los nexos en general.