La historia de la Iglesia católica, en México

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Una de las colecciones de arte más importantes del mundo viajará a México para su exhibición en el Antiguo Colegio de San Ildefonso: la muestra De Pedro a Francisco, dos mil años de historia, la cual aborda la trayectoria de la Iglesia católica desde la llegada de Pedro a Roma hasta el pontificado de Francisco.

Esta gran exposición se desarrollará en septiembre de 2017, con la finalidad de celebrar los 25 años del reinicio de las relaciones diplomáticas entre México y la Santa Sede, dice a MILENIO Antonio Berumen, incansable promotor cultural y artífice de esta exposición.

Para que la muestra sea todo un éxito, detalla que ya trabajan en colaboración con Bárbara Jatta, la nueva directora de los Museos Vaticanos, historiadora del arte y primera mujer en ocupar este cargo tan relevante.

Después de una reunión oficial, se ha determinado que la exposición estará integrada por más de 300 piezas pertenecientes a colecciones únicas, que jamás han salido juntas del Vaticano.

“La exposición, que tratará la historia del Vaticano a lo largo de los siglos, presentará invaluables obras de los Museos Vaticanos, pero también de la Pinacoteca Apostólica Vaticana, del Museo del Tesoro de San Pedro, del Archivo Histórico de la Basílica de San Pedro, incluidas algunas piezas del Archivo Secreto y Biblioteca Apostólica, además del Museo del Tesoro de San Juan de Letrán y del Museo Histórico de San Juan de Letrán. Por todo ello se proyecta como una de las grandes exhibiciones vaticanas en nuestro país”.

La muestra en México será única por el acervo que la conformará, asegura Berumen, quien refiere que en Rusia se acaba de realizar una exposición con parte de esos tesoros vaticanos, pero solo con obra de la Pinacoteca Vaticana.

Para lograr esta hazaña, reconoce, “recibimos el gran apoyo de nuestro amigo que se nos fue, Rafael Tovar y de Teresa, quien como secretario de Cultura impulsó esta muestra. Hemos sentido muchísimo su partida pero ahora hay que seguir adelante”.

Los contenidos de la muestra

La exposición estará dividida en diversos núcleos temáticos que aún no están totalmente definidos, pero Berumen adelanta que podrían ser ocho: “Pedro de Roma y los mártires”, “Constantino”, “El Medioevo”, “El Renacimiento, Miguel Ángel y los grandes artistas”, “La caída de los Estados pontificios”, “La creación del Estado vaticano”, “El Concilio Vaticano II” y “Los papas contemporáneos”.

El propósito de este esfuerzo es que el público pueda adentrarse en los primeros siglos de historia del Vaticano, desde la llegada de Pedro hasta la de Constantino a Roma. Posteriormente la intención es que se incursione en la parte del Medioevo, y del Renacimiento con el papa Julio II, la Capilla Sixtina y, obviamente, los grandes artistas de esa época.

En este recorrido los visitantes podrán conocer cómo se dio el tránsito a la Basílica de San Pedro, hasta llegar a la caída de los Estados pontificios y la constitución del Estado vaticano por la independencia de la Iglesia respecto del Estado italiano, y adentrarse en los postulados del Concilio Vaticano II.

Berumen indica que la exposición permanecerá montada durante cuatro meses en San Ildefonso, periodo en el que se calcula que podría ser vista por alrededor 350 mil personas.

Los preparativos

Desde el pasado octubre se viene preparando la exposición De Pedro a Francisco, dos mil años historia. Su promotor, Antonio Berumen, dice que ya hicieron una reunión con la directora de los Museos Vaticanos, Bárbara Jatta, así como con la señora Bertha Cea, coordinadora ejecutiva del Mandato del Antiguo Colegio de San Idelfonso, y con el arquitecto Enrique Ortiz Lanz, curador de la muestra que presentará la colección de los Museos Vaticanos en México.

Refiere que incluso tuvieron una comida formal en la embajada de México ante la Santa Sede para hacer la petición oficial y que la colección de los Museos Vaticanos se pueda exhibir esta importante exposición en México.

Para lograrlo, ya se reunieron con el cardenal Giuseppe Bertello, quien fuera nuncio en México y ahora es presidente de la Comisión Pontificia para el Estado de la Ciudad del Vaticano, y con Sandro Barbagallo, curador de las Colecciones Históricas de los Museos de Vaticanos para ultimar los pormenores de esta magna exposición.