Juana Cata, la confidente de Porfirio Díaz
El imparcial
Istmeña y pionera de su época, ha despertado la inspiración de diversos escritores e investigadores para destapar sus mitos, entre ellos el ser amante del Porfirio Díaz.
«Juana Cata, la confidente de Porfirio Díaz» es el reciente libro del escritor oaxaqueño Antonio Olivera, quien ha investigado por años los misterios que han rodeado a esta mujer.
El libro de corte histórico, hace un recuento de la vida de Juana Catalina Romero Egaña, proveniente de una familia de españoles que vinieron Barrio de Jalisco de la Villa de Guadalcazar, hoy Tehuantepec.
«Era una mujer que luchó en su tiempo en contra de todas las situaciones vividas, sin embargo fue triunfadora sin haber sido soldadera o mujer pública, solo fue una gran mujer que a través de su carácter y personalidad podía resolver los asuntos», en este sentido, el escritor menciona que Juana Cata, tenía injerencias políticas, sociales y culturales en la región del Istmo de Tehuantepec en el siglo XVII, tales como la resolución del conflicto territorial entre el Barrio de San Blas y Tehuantepec, la huelga de trabajadores del ferrocarril y la influencia que tenía dentro de la Iglesia Católica con el entonces Arzobispo Eulogia Gillow.
«Juana Catalina no puede ser considerada como un personaje regional, tiene que ser considera en la historia de México como un personaje nacional, porque era mediadora y me atrevo a decir que la primera mujer empresaria de su tiempo», destaca Olivera.
Uno de los mitos más grandes de esta mujer fue su supuesta relación amorosa con Porfirio Díaz, la cual el investigador desmiente y por lo que se le ha creado cierta fama a nivel nacional, además algunos dichos populares mencionan que Doña Juana era bruja, por el manejo de hierbas, otro mito que su investigador niega.
Otros escritores e investigadores se han enfocado en mostrar la vida de Juana C. Romera, también conocida como la benefactora de Tehuantepec.
En el libro «Una mujer extraordinaria en la historia de México» Raciel Sánchez Rivas y Julia Astrid Suárez Reyna destapan las cualidades de la istmeña y rescatándola de la fama de ser compañera sentimental de Don Porfirio Díaz.
Por su parte, la doctora y profesora de la Universidad de Kentucky Francie Chassen-López en su investigación «Poder y género en el siglo XIX: La historia extraordinaria de Juana Catalina Romero, cacica de Tehuantepec», menciona el poder económico que esta mujer llegó a tener: fue la mujer más rica de Tehuantepec, era empresaria azucarera y textil por lo que viajaba constantemente a Europa y fue la representante y corresponsal del Banco Nacional de México (Banamex) en Tehuantepec.