Médicos se equivocan y embalsaman a una mujer viva

EXCELSIOR

Ekaterina Fedyaeva acudió a una clínica ubicada en Rusia para realizarse una sencilla cirugía; por equivocación le inyectaron un líquido compuesto por un derivado de formol
   CIUDAD DE MÉXICO

Historias de ‘mala praxis’ en el quirófano son compartidas cada cierto tiempo alrededor del mundo. Desde la mujer a la que le amputaron el brazo que no era hasta olvidos de instrumentos quirúrgicos dentro del cuerpo del afectado.

Sin embargo, el que recientemente se dio a conocer en redes sociales, parece sacado de una película de terror.

De acuerdo con RTEkaterina Fedyaeva acudió a un centro médico de la región de Ulyanovsk al oeste de la Federación Rusa para realizarse una operación en la que le quitarían un quiste ovárico con el objetivo de que se pudiera embarazar en poco tiempo.

Desafortunadamente, lo que debía ser una cirugía sencilla terminó en tragedia cuando por error los trabajadores médicos en lugar de introducirle una solución salina le inyectaron un líquido compuesto por un derivado de formol que se utiliza comúnmente para evitar que los cuerpos sin vida se descompongan.

Debido a que la joven de 28 años se encontraba en riesgo, fue trasladada de laUnidad Central de Salud Clínica a la unidad de Cuidados intensivos del Hospital Clínico Regional Ulyanovsk, donde se intentó estabilizarla.

Ya estando internada y tras un complicado proceso de limpieza, los médicos lograron reanimarla, momento que aprovechó para decirle a su madre: «Mamá, me muero».

Tras semanas en cuidados intensivos, Fedyaeva murió el 5 de abril a causa de las complicaciones que le generó la negligencia médica.

Luego de que la noticia se dio a conocer, Rashid Abdullov, ministro de Salud de la región, indicó que ya se organizó una comisión especial para investigar qué sucedió en el quirófano y determinar exactamente de quién fue la culpa.

Expreso mis más sinceras condolencias a los familiares y amigos de Ekaterina Fedyaeva. Es una gran tragedia. Brindaremos toda la asistencia. Los funcionarios culpables serán juzgados, los cuerpos de investigación continuarán trabajando,” indicó el ministro a través de su cuenta oficial de Twitter.

El caso además de indignación en la población, provocó que las autoridades rusas anunciaran que se realizarán investigaciones federales en los hospitales de la región con el fin de evitar malas prácticas médicas.

Aunque no se reveló cuál fue la dosis que el personal de la clínica le inyectó a Ekaterina, de acuerdo al Centro para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), un adulto puede morir tras ingerir apenas 30 mililitros de una solución con 37% de formaldehído.