Ola de calor mata las aves silvestres en reservas de Tamaulipas y SLP

Los especialistas recogieron 22 aves deshidratadas, incluidos 15 búhos, que requieren rehabilitación, antes de regresar a su hábitat natural.

EXCELSIOR 

La segunda onda de calor, que ya rompió récords de temperaturas en 10 ciudades de la República Mexicana, está provocando la muerte masiva de aves silvestres en Tamaulipas y San Luis Potosí, donde los termómetros superan los 50 grados centígrados.

En la Reserva de la Biosfera El Cielo, ubicada al sureste de Tamaulipas y la Reserva de la Biosfera Sierra del Abra Tanchipa, al noreste de San Luis Potosi, en el corredor de la Sierra Madre Oriental, están apareciendo sin vida, tirados en el suelo, decenas de cotorros cabeza de viejo (Pionus senilis); cotorras tamaulipecas (Amazona viridigenalis); loros cabeza amarilla (Amazona oratrix), y loros de cachetes amarillos (Amazona autumnalis),

Erick Rubén Rodríguez Ruíz, integrante de la Comisión de Parques y Biodiversidad de Tamaulipas, reveló que los ejemplares mueren por golpes de calor y deshidratación, lo que se incrementa debido a los cuatro incendios forestales que se registran en estos momentos en Tamaulipas y tres en San Luis Potosí.

Destacó que en la parte sur de Tamaulipas y la colindancia con San Luis Potosí, se han alcanzado hasta 52 grados centígrados de temperatura, en municipios como Xicoténcatl, Llera, El Mante, Gómez Farías y Antiguo Morelos, así como pegado a la Huasteca Potosina, en los municipios de Ciudad del Maíz y Ciudad Valles.

El doctor en Ciencias, destacó que las aves silvestres se están acercando peligrosamente a las cabeceras municipales en busca de agua, debido a las olas de calor y la sequía  —que cada vez serán más intensas y recurrentes debido al cambio climático—, por lo que exhortó a la población a apoyar colocando bebederos colgantes y a nivel del suelo para las especies de vida silvestre.

Por su parte, Francisco Javier Sahagún Sánchez, profesor-investigador de la Universidad de Guadalajara (UdeG), con 10 años desarrollando proyectos en la zona de la huasteca, alertó que además de la muerte de cotorras tamaulipecas y loros cabeza amarilla, especies en peligro de extinción, de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana 059, también existe el reporte del deceso de un coyote por golpe de calor.

El doctor en Ciencias Ambientales, explicó que si bien, hay antecedentes de eventos de mortandad de aves por altas temperaturas, «particularmente éste es uno que se ha manifestado de una forma exacerbada, y no tengo los elementos, pero quizá hay otros factores que se están sumando, como la radiación que está recibiendo la Tierra, que pudiera estar influyendo».

Sahagún Sánchez, señaló que ante la emergencia climática, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), y la Comisión Nacional Forestal (Conafor), deben fortalecer las estrategias y disponer de más recursos para colocar bebederos (aguajes), dentro de las reservas ecológicas y poner en marcha acciones preventivas contra los incendios, como la apertura de brechas cortafuegos y el reforzamiento de las brigadas comunitarias.

En redes sociales, el refugio Selva Teenek Ecopark ubicado en Ciudad Valles, en la Huasteca Potosina, externó su preocupación por la aparición de cotorros, tucanes y búhos con golpes de calor, debido a las altas temperaturas que azotan al país y la sequía.

Tan sólo en dos días, los integrantes de esta organización no gubernamental, recogieron 22 aves deshidratadas, incluidos 15 búhos, que requieren rehabilitación, antes de regresar a su hábitat natural, lo que les impide seguir atendiendo a más ejemplares, debido a que desde febrero se encargan de otros 12 casos. Por lo anterior, Selva Teenek Ecopark subió a su página de Facebook tutoriales para explicar a la ciudadanía cómo pueden ayudar:

  • Evita sumergir al animal en agua, ya que esto podría provocar un choque térmico.
  • Coloca al animal bajo la sombra con un trapo, pero ten precaución, ya que algunas aves pueden picar.
  • Rociar ligeramente al animal con agua a temperatura ambiente.
  • No abrir el pico del animal y dale agua si está inconsciente para evitar una broncoaspiración, es decir que el líquido se vaya por sus vías aéreas.