Niño muere luego de que médicos aseguraran que exageraba una congestión nasal y lo enviaran a casa
Un adolescente murió pocos días después de que los médicos supuestamente lo descartaran por presuntamente estar exagerando los síntomas.
MILENIO
Un adolescente de 15 años, originario de Australia murió luego de presentar una congestión nasal durante tres días antes de que su madre, Sharon Gauci, de 45 años, lo llevara a urgencias luego de que el menor pareciera estar confundido, reporta el medio The Sun.
La madre compartió con el diario británico que acudió con su doctor de cabecera para que examinara a su hijo; sin embargo, el médico decidió canalizarlo a urgencias al hospital pues: «Dijo que necesitaba que lo examinaran de inmediato porque, según ellos, lucía muy mal y confundido». Alguna de las características que presentaba era una temperatura elevada y frecuencia cardíaca y presión arterial bajas: «Su temperatura era de 40ºC», señala la progenitora.
Una vez que el menor y su familia llegaron al hospital, supuestamente tuvieron que esperar 90 minutos antes de que Treva Ashton, nombre del menor, fuera revisado por paramédicos y enviado a casa recetándole paracetamol.
Según información compartida por el medio The Sun, las enfermeras sospecharon que el menor tenía un virus estomacal o gripe y simplemente necesitaba descansar.
Aunque el padre del menor, Darren Ashton, dijo que obviamente era algo más serio.
«Tenía los ojos en blanco y no sabía qué estaba pasando. Estaba confundido y aturdido», dijo el hombre de 45 años.
Una vez que llegaron a casa, Treva vomitó, tuvo escalofríos y comenzó a quejarse de que le dolía la cabeza. Más tarde, el llanto del menor despertó a sus padres con un grito de dolor pues manifestó que no podía mover la pierna.
Llamaron a una ambulancia, pero cuando llegaron los paramédicos, supuestamente dijeron que el menor necesitaba beber más agua y reiteraron: «probablemente tiene un virus estomacal o gripe y si lo llevamos al hospital, contraerá otros virus» y añadieron «Ya sabes cómo son los niños, podría estar siendo demasiado dramático'», agregó Sharon, madre del menor.
Sin embargo, en ese momento Treva estaba «muy pálido» y la madre dijo que de alguna manera sabía que había algo mal con su cerebro. Su cabeza estaba tan hinchada «que parecía que iba a explotar», su vómito contenía sangre y le dolía todo el cuerpo.
Días más adelante, Sharon volvió a llamar a una ambulancia y finalmente, el menor fue trasladado de urgencia a otro hospital, donde lo pusieron en coma.
Una tomografía reveló finalmente lo que ocurría con el menor, notaron que tenía líquido en el cerebro y le dieron antibióticos para ayudar a matar la infección y fue inducido al coma.
Luego, Treva se sometió a una cirugía para extirparle parte del cráneo, que estaba «lleno de pus», y drenar el líquido antes de someterse a dos operaciones más el 1 de julio.
«Tuvieron que hacerle un agujero en la ceja para aliviar la presión y limpiarle los senos nasales», dijo Sharon.
Poco tiempo después, el adolescente fue declarado con muerte cerebral y los cirujanos le dieron la noticia de que no había nada más que pudieran hacer.
La familia de Treva descubrió más tarde que entre la primera ambulancia y la segunda, había sufrido un derrame cerebral, antes de sufrir varios más entre sus operaciones.
Finalmente, el menor fue desconectado el 7 de julio pasado. Tras la situación, la madre del joven mencionó que recordará a su hijo como «tierno, guapo y divertido», dijo: «(Su muerte) podría haberse evitado»; además dio a conocer que abrió una página en GoFundMe para poder recaudar dinero para los gastos funerarios de su hijo.