El partido de futbol que detuvo la Primera Guerra Mundial, así fue “La Tregua de Navidad” que pasó a la historia

Este acontecimiento histórico se convirtió en un emblema de humanidad y esperanza en tiempos de conflicto, donde el deporte fue el pretexto perfexto

EL HERALDO DE MÉXICO

Cabe destacar que la Primera Guerra Mundial, iniciada en 1914, era una confrontación brutal y sin precedentes. Las trincheras se extendían por cientos de kilómetros en Europa Occidental, albergando a soldados británicos, franceses, alemanes y de otras nacionalidades.

Estos soldados vivieron este conflicto bajo condiciones extremas que pudieron acabar con sus vidas antes de las balas: frío intenso, hambre, enfermedades y constantes bombardeos. En este contexto de sufrimiento, la llegada de la Navidad representó un contraste emocional.

¿Cómo fue la “Tregua de Navidad”?

La tregua no fue un acto organizado ni aprobado por los altos mandos militares, más bien, fue un gesto espontáneo que nació del cansancio de la guerra y del deseo de los soldados de reconectar con su humanidad. El futbol fue el pretexto perfecto para hacerlo realidad.

Todo comenzó en la Nochebuena de 1914, cuando soldados alemanes decoraron sus trincheras con velas y pequeños árboles de Navidad. Desde sus posiciones comenzaron a entonar villancicos como «Stille Nacht» y es que  los soldados británicos, sorprendidos, respondieron con sus propios cánticos navideños algo que inicialmente fue un intercambio musical derivó en algo mucho más significativo.

Así jugaron el día Navidad en la Primera Guerra Mundial/Créditos @Arcdelahistori

Con cautela, algunos soldados salieron de sus trincheras hacia tierra de nadie, el espacio mortal que separaba las líneas enemigas. Contra todo pronóstico, no hubo disparos. En lugar de eso, los hombres estrecharon manos, intercambiaron saludos e incluso pequeños obsequios como cigarrillos, chocolates y botones de uniforme. Fue un momento de fraternidad que desafió la lógica del conflicto.

El acto más recordado de esta tregua fue el partido de futbol que tuvo lugar entre los soldados. Aunque los detalles varían dependiendo del testimonio, la escena es clara: un grupo de hombres, sin importar su nacionalidad, jugando al futbol en un campo improvisado en tierra de nadie. No hay registros oficiales del marcador ni del tiempo que duró el juego, pero lo importante no fue el resultado, sino el simbolismo del acto.

Futbol en plena Primera Guerra Mundial/Créditos @Arcdelahistori

Los soldados usaron balones improvisados, y las porterías se marcaron con objetos disponibles en el campo de batalla. A pesar de las diferencias de idioma, todos entendían las reglas básicas del juego. El futbol, en este caso, se convirtió en un lenguaje universal que unió a los combatientes por unas horas.

Lamentablemente, la tregua fue breve. Los altos mandos de ambos lados desaprobaron estas muestras de fraternidad, temerosos de que pudieran debilitar la moral combativa. En algunos sectores, los oficiales amenazaron con severos castigos para aquellos que continuarán confraternizando con el enemigo, así, poco a poco, los soldados regresaron a sus trincheras y la guerra retomó su curso devastador.