Las cosas que no debes hacer el 31 de diciembre para evitar desatar la ira de los demonios

Durante este periodo de cambio, las energías se encuentran muy cerca del plano terrenal y aunque en su mayoría son positivas, también existen muchas otras que podrían dañarte

EL HERALDO DE MÉXICO

El 31 de diciembre es una fecha cargada de rituales, tradiciones y supersticiones en diversas partes del mundo, pues aunque la llegada del nuevo año se celebra con entusiasmo, también se deben tener en cuenta algunas precauciones ya que según algunas creencias, esta noche es un umbral entre el viejo y el nuevo año, un momento donde las energías pueden ser tan intensas que, si no se tienen cuidados especiales, pueden desatar la ira de entidades sobrenaturales o incluso de los demonios.

De acuerdo con expertas en magia, este día se percibe como un momento en el que las energías negativas se intensifican debido a la transición simbólica entre el final de un año y el comienzo de otro. Este momento de cambio de ciclo crea una sensación de vulnerabilidad espiritual, pues se cree que las fuerzas cósmicas están en un estado de alteraciones y las creencias ancestrales sostienen que este paso entre dos mundos abre una puerta que puede permitir que tanto energías positivas como negativas fluyan más fácilmente, haciendo que la noche sea especialmente propensa a influencias sobrenaturales.

Otro factor que contribuye a la creencia de que las energías negativas son más fuertes esa noche tiene que ver con las prácticas y rituales ya que en muchas culturas, el 31 de diciembre es un día cargado de simbología, en el que se realizan diversas ceremonias para protegerse de las malas influencias. Estas prácticas, como barrer la casa o hacer ruido para ahuyentar a los malos espíritus, están diseñadas para proteger a las personas de las entidades negativas que, según se cree, rondan más intensamente en esta fecha.

¿Qué cosas debes evitar el 31 de diciembre del 2025?

Según diversas tradiciones espirituales, el universo busca mantener un equilibrio entre las energías positivas y negativas, pues al ser el cierre de un ciclo anual se cree que las energías negativas, acumuladas por las experiencias no resultados del año, emergen más fácilmente. Esta liberación de energías residuales puede resultar en un aumento de las energías oscuras que se perciben como más intensas en la víspera de Año Nuevo; por ello existen algunas prácticas que debes evitar para no comenzar el 2025 con energía negativa.

Si sigues estas recomendaciones, podrás asegurarte de que el año que comienza sea uno lleno de buenas energías, prosperidad y bienestar.
Fotografía: Freepik.

No dejes que la casa quede desordenada

Una de las creencias más antiguas sobre el 31 de diciembre es que la limpieza es fundamental para empezar el nuevo año con buen pie. Según algunas supersticiones, si dejas tu hogar desordenado, puedes atraer la negatividad de los demonios y otros seres oscuros ya que los demonios, según se creen en varias culturas, son atraídos por la suciedad y el desorden. Así, no limpiar y organizar tu hogar antes de la medianoche puede abrir las puertas para que las fuerzas malignas invadan tu espacio.

Es importante, por lo tanto, dedicar parte de la tarde del 31 a limpiar tu casa, sacar la basura y asegurarte de que todo esté en orden. Además, es recomendable no dejar ropa sucia, platos o cualquier otro tipo de desorden. En algunas tradiciones, incluso se sugiere barrer la casa hacia afuera para ahuyentar la mala suerte y las malas energías.

Evita llorar o lamentarte

Otro consejo importante es evitar las lágrimas o las lamentaciones en la víspera de Año Nuevo ya que las supersticiones dicen que si lloras en esta noche, atraes energías negativas que pueden seguirte durante todo el año. Las emociones de tristeza o desesperación pueden abrir puertas a los demonios, según algunas creencias.

Por el contrario, es recomendable mantener un ánimo positivo y alegre; si estás rodeado de amigos y familiares, disfrútalos al máximo. La risa, la alegría y la celebración son consideradas armas poderosas para repeler a las entidades malignas. Los demonios, según algunas creencias populares, son atraídos por las emociones negativas y se sienten repulsos por los momentos de felicidad genuina.

Se piensa que, durante esta noche, las entidades del más allá tienen mayor acceso a nuestro plano, lo que puede dar lugar a la intensificación de las energías negativas.
Fotografía: Freepik.

No rompas nada importante

Una tradición ampliamente difundida es la de romper objetos durante la celebración del 31 de diciembre, especialmente platos ya que en algunos lugares se cree que romper un plato simboliza deshacerse de lo viejo y dar paso a lo nuevo. Sin embargo, es importante no romper objetos valiosos ni significativos, pues hacerlo podría atraer la furia de los demonios. Romper objetos de valor o cosas que sean parte de tu historia personal puede ser interpretado como un acto de desdén hacia el orden natural de las cosas y, según algunas creencias, esto podría invocar la ira de fuerzas oscuras.

Si deseas llevar a cabo el ritual de romper algo, asegúrate de que no sea un objeto con valor sentimental o económico. Además, no es recomendable hacerlo en un espacio cerrado, ya que la acumulación de fragmentos podría ser interpretada como un símbolo de caos, atrayendo energías negativas.

Evita pelear con alguien el 31 de diciembre

Las peleas, discusiones y disputas familiares o con amigos son especialmente peligrosas en la noche de Año Nuevo ya que según las supersticiones, los demonios se alimentan de la energía negativa generada durante los conflictos. Las palabras hirientes y los sentimientos de enojo o frustración pueden abrir puertas para que las entidades malignas se acerquen a ti.

Es crucial pasar este tiempo con una actitud pacífica, tolerante y comprensiva; si tienes desacuerdos con alguien, trata de solucionarlos antes del 31 de diciembre. Los demonios, según las leyendas, son especialmente sensibles a las emociones de ira y resentimiento, por lo que una discusión o confrontación puede ser el catalizador para que estas energías oscuras se desaten.

La idea de que los demonios y otras entidades oscuras tienen mayor libertad de acción en la noche del 31 de diciembre se basa en la creencia de que los límites entre el mundo espiritual y el terrestre se diluyen.
Fotografía: Freepik.

No salgas a la calle después de la medianoche

También se cree que salir de casa después de la medianoche del 31 de diciembre puede ser peligroso, pues las fuerzas oscuras toman el control del mundo exterior durante esa hora. Según algunas creencias, los demonios y otras entidades malignas se sienten más poderosas en la noche de Año Nuevo y si te encuentras fuera de casa en ese momento, podrías ser vulnerable a sus influencias.

Es por eso que es recomendable pasar la medianoche en casa, rodeado de tus seres queridos y si vas a celebrar fuera de casa, asegúrate de regresar antes de la medianoche para evitar cualquier riesgo. Además, si puedes, asegúrate de cerrar todas las puertas y ventanas de tu hogar para sellar el lugar y protegerlo de posibles amenazas.

Las reglas más importantes que debes seguir el 31 de diciembre

No dejes comida en la mesa durante la noche

Una superstición común en varios países es no dejar comida en la mesa después de la medianoche. Se cree que los demonios pueden alimentarse de la comida dejada en la mesa, lo que puede atraer fuerzas negativas o mala suerte. Aunque esto puede sonar extraño en tiempos modernos, sigue siendo una creencia relevante en muchas culturas.

Por lo tanto, asegúrese de recoger la comida sobrante después de la celebración. En algunas tradiciones, también se recomienda ofrecer un pequeño banquete o una ofrenda a los espíritus benevolentes para evitar que los demonios se sientan atraídos por la comida restante.

Las emociones intensas, como la tristeza por lo no logrado o el miedo al futuro, son comunes al final del año.
Fotografía: Freepik.

No saltes a la media noche

En muchas partes del mundo, la costumbre de saltar a la medianoche se asocia con la idea de «desprenderse del pasado» y dar la bienvenida al futuro. Sin embargo, también se dice que si no realiza el salto correctamente o en el momento exacto, podrías desatar fuerzas oscuras y para evitar este peligro, asegúrese de estar bien preparado para saltar al compás de las campanadas. Si no sigues esta tradición de forma adecuada, según algunas creencias, los demonios podrían aprovechar la ocasión para sumergirte en malas energías o incluso para bloquearte el camino hacia un año próspero.

Evita usar armas o herramientas de corte

Aunque parezca poco probable, en algunas regiones del mundo se tiene la creencia de que el uso de objetos cortantes, como cuchillos o tijeras, en la víspera de Año Nuevo puede abrir portales hacia el mundo de los demonios. Estas herramientas son vistas como símbolos de división y destrucción, por lo que su uso en la noche del 31 podría atraer la ira de seres malignos que se alimentan de esas energías. Para evitar cualquier inconveniente, es recomendable mantener estos objetos alejados durante la noche. Si necesita cortar algo, como la comida o una bebida, asegúrese de hacerlo antes de que llegue la medianoche.

No olvides agradecer a tus ancestros

Finalmente, un aspecto clave de la noche de Año Nuevo es el acto de rendir homenaje a nuestros ancestros y seres queridos que ya no están con nosotros. En muchas culturas, se cree que los demonios pueden aprovechar la ausencia de gratitud o respeto hacia los ancestros para invadir nuestros hogares.

Antes de las celebraciones, tómate un momento para agradecer a tus seres queridos ya tus ancestros; puedes hacerlo a través de una oración, una ofrenda simbólica o simplemente con pensamientos de gratitud. Esta acción te protegerá de cualquier influencia negativa y te asegurará un año lleno de paz y bendiciones.

Siguiendo estos consejos, no solo evitarás atraer la ira de los demonios, sino que también te rodearás de buenas energías, amor y prosperidad en el año venidero.
Fotografía: Freepik.

El 31 de diciembre es una noche mágica, llena de esperanza, renovación y tradiciones que nos conectan con lo espiritual. Si bien las supersticiones y creencias sobre los demonios pueden variar, lo que realmente importa es la intención con la que abordamos este día. Mantenerse positiva, agradecida y respetuosa con los demás y con las energías que nos rodean es clave para comenzar el año de la mejor manera posible.