Santuario Ostok abandona Culiacán con más de 700 animales rescatados; se van a Mazatlán
El operativo de reubicación se realizó en condiciones extremas, pero con acompañamiento especializado, marcando el mayor éxodo animal en la historia del rescate en México.

MILENIO
Tigres, leones, elefantes, jaguares, primates, antílopes y aves exóticas fueron trasladados en una caravana que se convirtió en símbolo: la versión moderna de un Arca de Noé, dejando atrás un territorio marcado por el miedo y la sangre.
Ostok Sanctuary, afectado por la violencia
El Ostok Sanctuary, considerado el centro de rescate de fauna silvestre más importante del país, cerró definitivamente sus puertas en la capital sinaloense luego de cuatro años de operaciones.
La decisión fue tomada tras una serie de episodios violentos que comprometieron la seguridad del personal y de los propios animales.
“Las condiciones de seguridad ya no se dan. Estamos moviendo a los elefantes… a Mazatlán, es lo más difícil para nosotros”, declaró Ernesto Zazueta Zazueta, presidente del santuario, al confirmar el cierre.
No se trató de una decisión precipitada. La violencia fue avanzando sobre Ostok: en febrero de este año, integrantes de su equipo fueron asaltados y despojados de una camioneta que utilizaban para rescates y traslados.

Desde entonces, salir a conseguir alimento o brindar atención veterinaria se volvió un riesgo mortal.
La carretera México 15, vía clave para acceder al santuario, ha sido escenario recurrente de bloqueos y enfrentamientos entre grupos armados.
La ubicación del centro quedó atrapada en un entorno de alto riesgo.
Sin más alternativa, el personal inició el operativo de traslado: animales en contenedores adaptados.
El destino es Mazatlán, específicamente el Bioparc El Encanto, donde se habilitaron nuevas instalaciones.
El trayecto fue largo, bajo temperaturas que superaron los 40 grados en sensación térmica, pero el equipo cuidó cada detalle. Veterinarios, cuidadores y especialistas acompañaron el proceso en todo momento.
Este traslado no es una huida, insisten desde Ostok. Es un acto de responsabilidad.
Traslado fue sin apoyo de autoridades
Ernesto Zazueta, presidente de Ostok Sanctuary en Culiacán, dijo que la mudanza que están llevando a cabo hacia el Bioparque “El Encanto” en Mazatlán la están realizando con sus recursos y sin ayuda de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa).
“Todo tan repentino. Nosotros de alguna manera avisamos -a las autoridades-. Incluso pedimos apoyo hasta para el traslado ahora en estos días, pero no tuvimos ningún apoyo. No tuvimos apoyo de seguridad para poder sacar a los animales, igualmente PROFEPA en ningún momento se presentó para apoyarnos. Tuvimos que hacer todo nosotros, tenemos que seguir adelante”, dijo.
En entrevista para MILENIO Televisión con Josué Becerra, el director del centro de rescate dijo que el traslado de más de 700 animales es resultado de la falta de recursos y atención médica debido a la violencia en la entidad.
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— Milenio (@Milenio) May 21, 2025
“El santuario tiene cuatro años en Culiacán, nunca habíamos tenido problemas. Pero recientemente hemos tenido problemas de extorsión, de amenazas, de quemarnos el área, y sobre todo que empezamos a tener problemas hasta para proveer a los animales de alimento”, explicó.
Señaló que los empleados e incluso los especialistas en medicina veterinaria “no se querían presentar, eran amenazados. Un día la elefanta Bireki se lastimó y tristemente ningún especialista de ningún lado quiso venir a ayudarnos a revisarla y curarla».
«Los mismos veterinarios de Culiacán dijeron ‘están en un área muy peligrosa, no podemos ir’. Y eso fue lo que nos hizo tomar la decisión de salirnos de Culiacán”.
El director, además, dijo que el traslado fue complicado, pero contaron con la ayuda de 15 veterinarios que les apoyaron. “Todo salió muy bien, los animales llegaron bien«.
«Pero mover 700 animales no es algo menor. Queda mucho trabajo pendiente, y el apoyo que pudiéramos necesitar son las autoridades, específicamente a Profepa para que nos dé las facilidades para mover a los animales”, dijo.
Además, aseguró que hay animales que no se han podido trasladar al nuevo espacio en Mazatlán porque “muchos de ellos están en procesos legales, pero la Profepa nunca resuelve. Nosotros metimos avisos de que los teníamos que mover por contingencia y no nos hicieron caso”.
