Calaveritas en la cultura
EXCELSIOR
Que lo traigan, al argentino, Aquel, al creador de Mafalda, La de la sopa, eterna la falda, No sé, ¿se llamaba Quino?
QUINO
Que sea una escena trágica,
todo un drama, un suceso,
que se me vea cada hueso,
¡ya sea, una novela gráfica!
Que lo traigan, al argentino,
Aquel, al creador de Mafalda,
La de la sopa, eterna la falda,
No sé, ¿se llamaba Quino?
Ya presente ante la Parca,
el humorista voluntario
le dibujó todo un muestrario,
de ella, la Jefa, la Matriarca.
¡Qué paren la vida, me quiero bajar!
habría dicho la niña, sincera,
pero ante la muerte artera,
¿Quién para la muerte?, ¿o es el azar?
LOUISE GLÜCK
El nobel literario
al fin para una poeta
inusual como cometa
en este premio tan etario.
El ojo en las flores,
en sabia extrañeza,
hallaste en la maleza
de las tumbas, sus colores.
La muerte es un lirio,
es un Iris salvaje,
es vendaval, es delirio,
y es, otra vez, salvaje.
Louise se supo humana
y amó en ocasiones,
la poesía, lengua profana,
fue su amor, ensoñaciones.
ALONDRA DE LA PARRA
Do, re, mí, ése es su trino
muy adentro del palacio,
la Tirana va despacio
entre cada desafino.
Desde el podio la batuta
es Alondra de la Parra,
que en música es astuta
y en cuerdas de guitarra.
A la Flaca le incomoda
que alguien le haga sombra,
Pero claro que le asombra
De la Parra y su Oda.
Música de violines
en un funeral en clave,
música para tales fines,
sí de Alondra, sí de un ave.
MANUEL FELGUÉREZ
La Muerte ahí se escondía
entre la pintura abstracta,
muerte, al fin, putrefacta
en silencio, en secrecía.
Ya sea de barro o terracota,
La Fría es justa en su forma
Nadie, ni el ojo, la deforma,
Ni el sol ni una sola gota.
A Felguérez lo llaman a cuentas,
por su arte tan difuso,
otros dirán que confuso,
pero arte al fin de cuentas.
Lo trajo al camposanto,
porque quiere su retrato,
y no es que sea un ingrato,
pero ella es un espanto.