El Azteca, un estadio histórico en proceso de renovación para el Mundial de 2026
El Coloso de Santa Úrsula se prepara para recibir su tercera Copa del Mundo y su tercera inauguración con varios cambios en puerta; los trabajos durarán 18 meses, tiempo en el que también esperan arreglarse con los palcohabientes
MILENIO
Cuando la pelota ruede el 11 de junio en el partido de inauguración de la Copa del Mundo 2026, el Estadio Azteca se convertirá en el único estadio en ser sede de tres Mundiales y tres juegos de inauguración, acrecentando su historia y el lugar que lo pone como uno de los inmuebles más importantes y legendarios del futbol a nivel mundial, donde Maradona y Pelé se coronaron, donde se creó uno de los mejores goles, donde se disputó el Partido del siglo y donde tuvo su origen la polémica Mano de Dios.
El pasado 29 de mayo, el Coloso de Santa Úrsula cumplió 58 años. Su edad, diseño e incluso algunos aspectos arquitectónicos han quedado rebasados por los modernos requerimientos de FIFA, por lo que, a pesar de ser uno de los 16 elegidos, quedó advertido sobre una remodelación que le permita cumplir con todos los requisitos. Trabajos que, a dos años de distancia, apenas comenzaron.
Aunado a este tema el Estadio Azteca tiene otro contratiempo: resolver un conflicto con sus palcohabientes, quienes exigen que se les respete los contratos que firmaron en la década de los 70 y que les dan acceso a todos los eventos del Coloso de Santa Úrsula por 99 años.
Una remodelación postergada
Al ser una edificación de 1966, desde que en 2020 el Azteca apareció en la lista de posibles sedes, se habló sobre una remodelación profunda; incluso rondaron imágenes de un ambicioso proyecto que contemplaba, además de la renovación, la construcción de una plaza comercial, un hotel y un estacionamiento de ocho niveles, en un área de casi el doble de lo que ocupa actualmente el Coloso.
Las sedes fueron oficializadas el 16 de junio del 2022 y a partir de ese momento se han dado a conocer varias fechas para el cierre del inmueble y el inició de las obras. Sin embargo, y aunque Cruz Azul salió antes del inicio del Clausura 2024, el Azteca continuó en funcionamiento siendo casa del América hasta la Final de la temporada, un evento de la Kings League y un par de conciertos en el primer trimestre del año.
De acuerdo con información obtenida, la remodelación se fue aplazando por falta de dinero. De hecho, fue una de las causas por las que el Club América entró a cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) el pasado 20 de febrero. Con el tiempo encima, la remodelación pasó de ser un proyecto ambicioso a un proyecto que cumpla con las condiciones que pide FIFA.
Como la ubicación de los vestidores, que actualmente están de lado de la cabecera norte del inmueble. Para el Mundial tendrán que ser reubicados a una de las zonas laterales, que es por donde se ubican las bancas y por donde salen los jugadores y cuerpo arbitral para el protocolo antes de cada partido.
También tienen que eliminar las zonas lounge que tienen en las esquinas de la cabecera norte y sur, y que son patrocinadas por una refresquera. Además de una remodelación en la zona de medios de las gradas, auditorio para conferencias de prensa y la zona mixta, por donde pasan los jugadores a hablar con prensa una vez que terminan los juegos y la modernización del sistema de audio, vigilancia y pantallas.
El conflicto de los palcos
Apenas se hizo oficial la sede del Estadio Azteca para el Mundial 2026 y el tema de los palcos y plateas puso en alerta a sus propietarios, ya que para poder ser anfitrión de una Copa del Mundo, uno de los requisitos es que la FIFA se apodera de todas las localidades de los estadios.
El problema para el Coloso de Santa Úrsula es que los títulos de propiedad que se expidieron previo a su inauguración el 29 de mayo de 1966, otorgan a los dueños el derecho a asistir a cualquier evento que se realice en el inmueble: ya sean partidos de futbol locales o internacionales, conciertos y entre otros, además de la posibilidad de vender, heredar o ceder la propiedad.
Roberto Ruano, propietario y secretario general de la Asociación Mexicana de Titulares de Palcos y Plateas, platicó que los directivos del Estadio Azteca han buscado cambiar los títulos originales, algunos expedidos, por otros en los cuales el inmueble tiene menos obligaciones, como el hecho de dar acceso a algunos eventos que ellos llaman privados.
«La inconformidad que hay por parte de los titulares de palcos y plateas es porque hay muchas anomalías, el cambio de títulos originales por nuevos, en donde el estadio ya no está obligado a lo que estaba originalmente, esto es algo que estudian los abogados, porque es ilegal», dijo en entrevista a Multimedios Deportes.
«El título habla que se puede heredar, ceder, vender, sin perder los derechos y lo que están haciendo es cambiarlos por títulos donde las obligaciones del estadio son mucho menos que las originales».
Comentó que han tenido un par de reuniones con el director del Estadio Azteca, Félix Aguirre, a quien le han externado el motivo de su preocupación. No han tenido respuestas claras; sin embargo, agregó que les han pedido paciencia ya que se encuentran en pláticas con la FIFA para darle salida a este problema.
«El único avance es que en un par de ocasiones nos ha recibido el director del Estadio Azteca, Félix Aguirre. Nos ha pedido paciencia, nos habló de que la remodelación está pronta a iniciar.
«En una segunda ocasión nos reunimos con Félix y un ejecutivo más alto de la empresa. Nos dijeron que ya estaban en pláticas con FIFA y que estaban esperando que FIFA resolviera. El problema es de ellos, nuestros títulos son muy claros, especificados los derechos y las obligaciones del Estadio, entonces no debería ser un tema», apuntó.
La Asociación, compuesta por 210 titulares de palcos y plateas está preparada jurídicamente, comentó Roberto Ruano, para tomar las acciones que sean necesarias y aunque dijo que tienen fe en la buena voluntad del propietario del Estadio Azteca, no cederán en su lucha, ya que los derechos que tienen sobre sus títulos no pueden ser cambiados, aun hayan pasado más de 50 años.
«Es un derecho que tenemos por escrito. Cuando tú adquieres algo 40 o 50 años después no pueden cambiarse las condiciones. Tenemos los mejores abogados entre nuestros afiliados», agregó. «Sabemos que hubo negociaciones con algunos palcos donde parece que se va hacer una remodelación y los titulares están en su pleno derecho de negociar. En caso de no estar de acuerdo van a ser defendidos por la asociación», concluyó.