Habitantes de Chalco se vuelven a inundar y se mojan los enseres que les entregaron

Los vecinos expresan que viven con miedo, pues cada vez que llueve, las calles se inundan y los pocos muebles que tienen se dañan nuevamente.

EXCELSIOR 

A poco menos de dos meses de haber recibido enseres nuevos tras perder sus muebles en las inundaciones de aguas negras, los vecinos de la calle Purépechas, en la colonia Culturas de México, en Valle de Chalco volvieron a enfrentar el mismo problemalas viviendas se inundaron nuevamente, mojando los objetos que les habían entregado.

Los residentes explicaron que este fin de semana hubo una lluvia constante durante cerca de 24 horas, lo que provocó que el agua volviera a brotar de las alcantarillas. El nivel del agua alcanzó un tirante de 70 centímetros, afectando principalmente las calles Chalchihueticue y Purépechas.

Debido a que las banquetas tienen una altura aproximada de 80 centímetros, el agua no ingresó a las viviendas directamente, pero las alcantarillas comenzaron a desbordarse, inundando viviendas como la de Alejandra, ubicada en el lote 6 de la calle Purépechas.

Alejandra relató que el agua subió rápidamente y, de nuevo, los colchones que les habían entregado las autoridades en noviembre, después de perder todos sus muebles por las inundaciones, se mojaron nuevamente.

 

“Aquí estaba la estufa y el refrigerador, que no habíamos sacado porque pensábamos que si volvían las inundaciones, se mojarían otra vez. Pero mira, el agua subió otra vez y se volvió a mojar todo. Los colchones los subí para que empezaran a secarse con lo poquito que salió del agua», explicó.

Alejandra añadió que acababan de sacar el agua de los cuartos donde viven, pero una vez más, las coladeras hicieron que se inundaran.

«Este cuarto todavía no lo habíamos limpiado completamente. Ya habíamos sacado toda el agua, pero de nuevo se volvió a llenar», comentó. «Los enseres que nos dieron ya se mojaran de nuevo, y esos son los que acababan de entregarnos.»

Los vecinos expresan que viven con miedo, pues cada vez que llueve, las calles se inundan y los pocos muebles que tienen se dañan nuevamente.

«Estamos psicológicamente afectados porque no sabemos qué hacer. No tenemos a dónde ir. Podemos construir arriba o levantar los pisos, pero siempre terminamos levantando los pisos, como lo hice yo. Vivo en un lugar elevado, pero aún así se inunda», señaló Guillermo Cruz, vecino de Chalchihueticue.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *